Obviamente que ante esa pregunta, 30 sería una respuesta unánime pero en este caso nos referimos a los certámenes nacionales conquistados a partir de 1948 y en ese sentido, algunas personas podrían creer que son 37 los campeonatos merengues pero esa cifra corresponde a una versión equivocada y por esa razón, desmontaremos algunas leyendas urbanas tejidas alrededor de la escuadra alba.
Para empezar, aprovecharé para aclarar algunas dudas que me han planteado algunos aficionados en el sentido de que el torneo de 1972 de la Liga Nacional fue declarado desierto porque Olimpia se encontraba a punto de descender, sin embargo, eso no es cierto ya que el último clasificado, a dos vueltas para el final de la competición, era Marathón.
Lo que sí constituye un hecho es el que los merengues vivieron el momento más oscuro de su historia en 1954 ya que por el decreto 22 del 14 de enero de 1952 se establece que el último lugar de la categoría Primera A (liga Mayor) enfrentará en una serie por la permanencia al campeón de Primera B (intermedia) y a dos años de que dicha disposición entrara en vigor, Olimpia fue el ocupante del último puesto del certamen capitalino y ante esa situación, enfrentó en un cruce de tres partidos al Troya, resultando vencedor el equipo mitológico al triunfar por 4-1 en un duelo y empatar 3-3 y 1-1 en los restantes enfrentamientos así que los albos fueron relegados al entonces conocido como “tierrero” pero no llegaron a actuar en la Liga de Intermedia ya que el V Congreso Nacional Deportivo dejó sin lugar el descenso y le restituyó su posición en la Liga Mayor Francisco Morazán.
Paradójicamente, ese descenso fue el inicio del renacer olimpista ya que Rubén Callejas Valentine se puso como meta el hacer del club un referente nacional y estableció una serie de incentivos para sus futbolistas entre los que figuraban trabajo y educación y así el conjunto se armó y constituyó en una potencia que a la siguiente temporada se hizo con el título local y dos años después se consagraba por primera ocasión como campeón nacional.
Los merengues obtuvieron su primer torneo hondureño en la temporada 1957/58 al superar por 1-5 al Hibueras y repitió su éxito en la campaña 1958/59 tras imponerse por 2-0 ante el Independiente el 15 de febrero de 1959 y de esa forma se abrió la puerta para que Olimpia conquistara el primer tricampeonato de su historia al vencer por 2-1 al Honduras el 8 de noviembre de 1959 en El Progreso.
Así llegamos al certamen 1960/61 el cual fue declarado desierto por parte de la Federación Nacional Deportiva extraescolar de Honduras, ello ante la excesiva demora en la disputa de la fase final del torneo. A pesar de lo anterior, algunas fuentes equivocadamente otorgan ese título a Olimpia pero ese pentacampeonato construido de una forma errónea, no existe ya que la aludida competición fue cancelada el 6 de marzo de 1961, cuando los merengues no habían disputado ningún duelo ante los vencedores de las ligas de otras regiones del país y por ende, técnicamente es imposible que pudiera ser considerado como monarca nacional de esa temporada.
En la campaña de 1961, los albos retoman la senda del triunfo al adjudicarse su cuarto título nacional al igualar 2-2 en su duelo disputado el 19 de noviembre en San Pedro Sula ante el Independiente.
En 1962 se produce una interrupción en la hegemonía merengue y es despojado del campeonato local por el Federal, en tanto que el Vida se consagra como monarca hondureño pero tras la campaña 1963/64 reconquista el título al empatar 0-0 ante el España el 10 de febrero de 1964, resultado que le permite adjudicarse la serie ante los aurinegros tras ganar un duelo por 1-0 e igualar los dos encuentros restantes a cero goles.
Así se llegó al torneo 1964/65, el cual además del incentivo de consagrarse como monarca del país, ponía en juego los diez cupos para los participantes del naciente certamen de la Liga Nacional a la cual llegarían los cuatro primeros puestos del campeonato de Tegucigalpa, tres de San Pedro Sula, además de los vencedores de la competición local de Puerto Cortés y de los departamentales de Atlántida y Yoro. Así, Olimpia se adjudicó su sexto título nacional al vencer 2-0 a Platense el 20 de diciembre de 1964 en el estadio Francisco Morazán con dos anotaciones de Ricardo Taylor.
De esa forma, los merengues han conquistado 36 campeonatos hondureños avalados tanto por la Federación Nacional Deportiva Extraescolar y por la Liga Nacional, los cuales fueron implementados a partir de 1947 año en el cual el Victoria se consagró como primer monarca catracho.
