Michelle Obama ha demostrado que tiene un carácter y una inteligencia envidiable. Ayer su discurso en la convención demócrata en apoyo a Hillary Clinton, me hizo recordar al discurso: “I have a dream” (Yo tengo un sueño) de Martin Luther King.
Tocó temas que muy pocos se atreven, igualdad, racismo, sobre Hillary, una clara y contundente campaña contra Donald Trump por sus aberrados comentarios de odio y racismo.
A continuación un pequeño resumen de las palabras de la primera dama de los Estados Unidos de América:
A Donald Trump:
“El lenguaje de odio que escuchan en la televisión no representa el verdadero espíritu de este país. Nuestro lema es: Cuando caen bajo, nosotros apuntamos alto”.
“Cuando uno tiene los códigos nucleares y las armas en la punta de los dedos, es necesario ser medido, prudente y estar bien informado”.
“No dejen que nadie les diga que este país no es grande, porque este es, en este momento, ahora mismo, el mejor país de la tierra”. Misil directo para Donald Trump por el lema de su campaña.
A Hillary Clinton:
“Me despierto todas las mañanas en una casa que fue construida por esclavos y hoy veo a mis hijas, dos inteligentes niñas negras, jugar en su jardín. Hoy mis hijas dan por hecho que una mujer puede ser la próxima presidenta de Estados Unidos. ¡Gracias Hillary!”
“En estas elecciones solo confío en una persona para que sea la próxima presidenta y ella es Hillary Clinton, estoy con ella”.
“Hillary entiende que la presidencia de este país, trata sobre una sola cosa: Construir algo mejor para nuestros hijos”.
Sobre segregación y la igualdad:
“Quiero un presidente que tenga la visión de que todos fuimos creados iguales. Necesitamos líderes que le muestran a nuestros hijos lo que es la devoción y la decencia”.
“Hubo muchísimas generaciones que trabajaron para que este país fuera libre, gente que trabajó para acabar con la segregación”.
Realmente este discurso marcará la historia. Memorable; un discurso unionista, alejado del odio y la confrontación por colores de piel. Pasará a la historia.