Escapar a las vegas para contraer matrimonio es una de las situaciones de la vida que solo acostumbramos ver en las películas estadounidenses, pero tal parece que fuera de las cámaras, en el mundo real, un sujeto llamado Aaron Chervenak también emprendió un viaje para poder casarse, lo que llama la atención es con quien lo quería hacer, o mejor dicho con qué.
Tal parece que a Aaron se le despertó más que un sentimiento por su celular y llegó hasta el estado de Nevada en busca de todas las probabilidades existentes para lograr casarse con su Smartphone. Después de tanta persistencia por tener una vida al lado de su teléfono móvil, logró “llegar a altar” con él.
Llego a una de las capillas existentes en Las Vegas donde le planteó la idea a sus dueños, después de argumentar sus razones y hacer entender que no era una broma, aceptaron celebrar la ceremonia a pesar de la risible situación.
“Todos nos conectamos con nuestros teléfonos a diferentes niveles emocionales, lo buscamos para que nos calme, para que nos duerma y para mí de eso se trata una relación. En un sentido, mi smartphone ha sido mi relación más larga”, argumentó Aaron Chervenak