Bien dice La Biblia que en los últimos días se verán cosas… Aunque aún no hemos visto a hombres que caminen sobre las aguas o a muertes que resuciten, pero sí mensajes como el siguiente:
Campaña Solidaria: “Dona tu auto a la Iglesia”.
Pero ojo: ¡No es cualquier pichirilo! Sólo deben ser buenas máquinas, año 2013 para arriba. Así que si pensabas donarle a “Dios” convertido en pastor, que no sea un Toyotía mil de esos viejitos, ni una coronela de los 80´s.
No, papa… Solo carros nítidos, porque la obra de “Dios” hay que hacerla con aire acondicionado, buen estéreo, vidrios eléctricos, “quema-coco” y asientos de cuero.
El mensaje de la iglesia del final continúa: “Hacemos el llamado a quienes sienten que aún no han dado lo suficiente al Señor. Recordemos la historia bíblica de la viuda pobre, que dio todo lo que tenía y así agradó a Jesús.
¿Y tú, has dado todo lo que tienes?”.
¿Dar todo lo que tenés? ¿A cambio de qué? ¿Si solo tengo una casa y la estoy pagando, qué hago? ¿La dona a una iglesia y me quedo en la calle? ¿O luego los que piden en nombre de Dios me van a mantener? Que alguien me explique, porque no sé cómo funciona la cosa.
“Estamos recibiendo donaciones de vehículos modelos 2013 en adelante para hacer crecer nuestra noble obra de evangelización”, prosigue el comunicado. “No olvidemos, hermanos, que Dios ama al dador alegre”.
¡Todos a donar!
Realice su donación aquí:
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Al final, cada quien tiene la decisión propia de donar (y no solo autos, sino que cuentas en dólares, terrenos, artículos domésticos y hasta perros de raza, como pedía un pastor en un canal).
Y para ilustrar la campaña solidaria, ponen un BMW que solo un millonario puede tener. ¿Si alguien dona ese BMW, quién lo usará?
¿Y les darán jalón a los pobres que encuentran en el camino?
Hacé vos tus propias conclusiones y decinos si estás de acuerdo.