Durante cinco años, Jennifer Rivera fue una de las presentadora estrellas de noticias Tv 11. Sin embargo, desde hace unos días su bello rostro desapareció de las pantallas. En esta entrevista ella misma nos cuenta a qué se dedica en la actualidad y cuáles son sus pasiones y sueños.
Iniciamos preguntándole ¿Quién es Jennifer Rivera?
Es una hija, una madre, hermana, amiga, compañera, una persona que le gusta disfrutar de la vida y de las bendiciones que Dios le regala todos los días.
¿Por qué hacías periodismo?
En realidad soy licenciada en Turismo, esa fue mi primera elección. A raíz que me quedé sin empleo, como seis a ocho meses más o menos, anduve buscando trabajo y llegué a canal 11 para aplicar a una plaza en recursos humanos, pero me di cuenta que toda esa área estaba en San Pedro Sula.
Entonces supe que no iba a poder aplicar. En ese momento tenían una plaza para presentadora y me preguntaron si quería tratar, hacer una prueba. Nunca en mi vida me había imaginado estar en televisión, por lo general he sido una mujer muy tímida, después de seis meses sin trabajo había que probar. Hicimos el casting, la plaza era de un mes, pero a la semana me pusieron al aire.
Comencé presentando y después decidí estudiar Comunicación Social y Pública.
Ya terminé la carrera de Comunicación Social y Pública.
¿Cuánto tiempo estuviste en Canal 11?
Cinco años.
¿Por qué te vas de Canal 11?
Tenía dos trabajos, y con este último que me había surgido ya tenía problemas en cuanto a horarios.
En Canal 11 estaban exigiendo más tiempo de horario y se me complicaba para cumplir con mi jornada completa en el otro trabajo. Entonces, tomé la decisión.
Además, estaba sucediendo algo más que no iba con mis principios, valoré y decidí mejor renunciar a Canal 11, no por el canal en sí, sino por otras personas.
¿Qué tipo de situación fue esa que no iba con tus principios?
Preferiría dejarlo así.
¿Volverás a los medios?
No sé, vamos a ver qué pone Dios en el camino más adelante. Por los momentos estoy disfrutando mucho de este tiempo, cuando estaba con el canal y el otro trabajo no me quedaba tiempo para disfrutar con mi familia, con mi hija, con mis amigos. Cosas que quiero hacer, que me interesan, que no había podido hacer antes por diferentes circunstancias. Me está fascinando, pero si Dios me abre puertas en los medios, bienvenidos sean.
¿Dónde estás trabajando?
Estoy trabajando con el Instituto Hondureño de Ciencia Tecnología. Estoy como relacionadora pública y sí me gusta mucho, es un trabajo totalmente diferente, es del gobierno. Pero lo que vemos ahí es lo que realmente me interesa.
Impulsamos la ciencia, la tecnología, la innovación en los jóvenes, en profesionales, en los niños. Los temas que podés ver ahí me encantan, es muy interesante.
Vi unas fotos en las que estabas ayudando en unas casas. ¿Qué proyecto es ese?
Es “UN TECHO PARA MI PAÍS”. Esa actividad la hicimos con el canal, los jóvenes llegaron a solicitar ayuda a ver si había voluntarios. Y ayudar al prójimo me encanta. Sí Dios pone personas en mi camino para que me ayuden a mí, lo mínimo que puedo hacer es devolver lo poco que puedo aportar. Mediante una labor voluntaria, creo que lo puedo ir haciendo.
Estando ahí vos podes ver cómo son de agradecidas las personas, eso lo disfrutás. Además podés ver de las diferentes circunstancias que están enfrentando.
A veces, uno se queja por cosas como “No tengo qué ponerme hoy”. Algo mínimo, algo irrelevante, y ves cómo otras personas enfrentan la vida en situaciones que realmente son difíciles y también ves cómo las superan.
Nosotros, que estamos en mejores circunstancias, nos dejamos caer por algo que tal vez no es de mucha importancia.
¡Contame de tu revista de turismo!
Es un proyecto que propuse para mi monografía en la universidad cuando me gradué de Comunicadora Social y Pública, combinando mis dos pasiones profesionales. Decidí empezar con esa revista, por los momentos está en pausa por lo mismo del trabajo y no he podido dedicarle más tiempo.
Es digital e impresa, y está la idea que se pueda pasar por televisión como una sección.
¿Qué pretendías con esta revista?
Dar a conocer las bellezas de Honduras. Lugares que la gente no sabe que existen. Hay mucho más que Roatan, La Ceiba y Ruinas de Copán.
¿Cómo pretendés cambiar el chip de los medios de comunicación si prefieren vender sangre en primera plana a una noticia positiva?
Precisamente por eso, hay mucho amarillismo que el mismo pueblo lo demanda, porque se ha ido educando de esa forma, a través de los diferentes medios.
Es tiempo de cambiando poco a poco esa modalidad del hondureño o de la persona que radica en Honduras. Aun los extranjeros, una vez viviendo aquí, se van acoplando al mismo patrón de los hondureños.
Es difícil porque los medios de comunicación no colaboran con eso, la cultura de violencia es transmitida hasta en novelas de narcotráfico. Educan para mal y afecta hasta la forma de lenguaje de los hondureños.
Los niños también lo ven, van a la escuela y todos los compañeros están aprendiendo lo mismo porque los papás miran la novela con el niño al lado, seamos honestos, llaman la atención, uno es curioso y quiere ver realmente cómo es ese mundo y hay muchos que se introducen en él.
Poco a poco podemos ir cambiando ese chip, ojo, no ocultando la realidad del país, pero enfrentándola.
Espero algún día dejar de ver un robo, un asesinato, la corrupción, ir cambiándola para ir haciendo de Honduras algo mejor. Porque el culpable no es Honduras, somos nosotros sus habitantes.
¿Cómo atraerías turistas?
La idea es demostrarles las bellezas que tenemos, venderles la idea que Honduras no es un mal país, se corren riesgos, pero hay que comenzar a darle valor a lo que tenemos para poder transmitirlo a nuestros visitantes.
Si realmente amamos este país hay que hacer algo, venderlo de una manera positiva, de ver que podés disfrutar de Honduras y que encontrás alegría en las personas, atención y personas muy amables. Eso ya es ganancia.
¿Practicas alguna religión?
Sí, soy cristiana evangélica.
Háblame sobre eso:
Voy a la iglesia dos veces a la semana. Tengo mi grupo de crecimiento los días jueves y hay una reunión que se llama: “180 Profesionales” es para jóvenes, los viernes, se trata de hacer algo que te llame la atención, que te parezca interesante.
Me agrada cada detalle, cada enseñanza, es la Iglesia Gran Comisión.
¿A los cuantos años fuiste madre?
A los 19 años.
¿Te cambió la vida?
Claro, pero para bien. Era difícil porque me metí a cosas de adultos siendo una niña. Gracias a Dios eso me hizo madurar de inmediato.
Desde que te das cuenta que vas a traer al mundo a otra persona, vos cargás con esa vida, sos responsable de esa vida.
Así como tu madre te enseñó a vos, pero con menos edad. Aunque nunca vamos a estar preparados para poder educar a un hijo, aprendés en el camino, hay que pedirle a Dios la sabiduría necesaria, eso lo hace un poco más fácil. Fue un cambio difícil porque no me había graduado de Turismo aún, pero solo perdí un trimestre y eso se lo agradezco a Dios, mientras estuve embarazada.
Me gradué y conseguí un trabajo de inmediato.
¿Cómo se llama tu hija?
Marian Juliet.
¿Sos Vanidosa?
No.
¿Coleccionás algo?
Para nada, soy una persona despreocupada por eso. Solo si veo algo que realmente me gusta, que es necesario, lo compro. Hay que darse un gustito de vez en cuando. Pero mi prioridad son mi hija, mi familia, mi casa.
¿Te han hecho propuestas indecentes?
Sí, me sentí ofendida, me asusté e impacté. A veces es inimaginable las cosas que la gente puede decir. Siento que me faltan el respeto, pero he sabido poner un alto.
¿Qué te apasiona?
Me apasiona todo lo que me hace feliz, todo lo que disfruto de la vida. Me apasiona mi familia, mi hija, mis profesiones. Las relaciones publicas, Dios.
¿Te gusta algún personaje famoso?
¡No sé!… No tengo ningún favorito.
¿Con qué canción te identificas?
Es una canción cristiana, dedicada al Padre. Se llama: “Señor quiero ser como Tú”.
¿Tres cosas físicas y tres valores que busques en un hombre?
No sé, he tenido gusto muy variado. Olvidemos lo físico, importa, alguien atractivo, varonil, que tenga buen porte, que sea vea aseado, que sea carismático y simpático.
De valores, que ame a su familia, que su familia sea uno de sus principales motores, sus prioridades y que sea un hombre que alabe y tenga temor de Dios. Antes no lo tomaba en cuenta, pero ahora es importante.
¿Hay envidia entre las mujeres del medio?
¡Sí se da! No solo en los medios, sino en tu casa, familia, amigos. En el periodismo es muy competitivo porque cada día salen caras más jóvenes, preparadas que pueden llegar a suplir un puesto.
¿Sentiste envidia por alguien?
¡No! Pero si sentí en algún momento, que Dios me perdone. ¡Ja Ja Ja!
¿Cuál es tu meta?
Cumplir la voluntad de Dios en mi vida, independientemente de la que sea. Si Él me escoge para algo, pues obedecerle.
¿A quién admiras?
A mi madre. Porque ha sido una mujer luchadora, me crió sola, me ha logrado sacar adelante y Dios me puso a una gran mujer en el camino, me puso a cargo de una mujer muy valiosa.
A veces uno se enoja con ellos, pero hasta que sos madre te das cuenta por qué lo hace o lo hacía, solo queda respirar profundo y escucharla.
Las madres solo te quieren proteger y evitar que caigas en muchos problemas.
Mensaje Final:
Conozcan a Dios. Hay que conocer el libro más valioso que tiene el ser humano: La Biblia. Poco a poco, aunque no seás religioso, vas a conocer a Dios y es el único que nos puede salvar de todo lo que está pasando.
Al final Dios es la respuesta para todo, aunque muchos se burlen. Mi consejo en sí es ese, que acepten a Dios y lo acepten como su Salvador.
¡Gracias por tu tiempo!
Mirá la sesión de fotos que preparó Sergio Montero para RadioHouse:
