Para todo fan que ha seguido a Bunbury desde el inicio, como diría Nasralla, desde que era pobre. Hemos sido muchos los que nos hemos mantenido al pie de la bandera, en mi caso, desde 1993.
En este momento, Bunbury está de gira, presentando: El Libro de las Mutaciones, disco que grabó en los estudios Churubusco de la ciudad de México DF, bajo la firma de MTV Unplugged.
Enrique ya recorrió con Los Santos Inocentes, Argentina, Ecuador, Colombia, Guatemala y en esta semana tendrá presentaciones en México.
Detengámonos en Antigua, una ciudad netamente colonial, que guarda su magia y que aparentemente los años no le afectan, porque el escenario y el ambiente sigue siendo el mismo todo el tiempo.
En Antigüa quisiera morir dice Bunbury en El Extranjero, canción que salió publicada en su álbum “Pequeño” en 1999. No es para menos, es uno de los mejores recitales que ha dado Enrique en su carrera como solista, es una lástima que no haya sido considerado para un DVD. El concierto tuvo lugar en uno de los lugares más espirituales que tiene la Antigua, Guatemala, La Ermita de la Santa Cruz.
La invasión catracha:
Son más de 100 hermanos hondureños que hicieron el viaje para ver al mejor artista de rock en español de todos los tiempos, a continuación dejaré sus relatos:
José Cruz es de Choluteca y nos cuenta lo siguiente:
“Quizá soy el fan que más horas viajó para llegar hasta Antigua, mínimo, 16 horas por la ruta que tomamos. Si lo tuviera que hacer de nuevo, lo haría.
Me toco gastar ahorros, me tocó tomarme dos días libres sin goce de sueldo, para poder hacer el viaje que eran tres días exactos.
Un sentimiento irracional, todos los que crecimos escuchando la música de Héroes del Silencio y de Bunbury, compartimos ese mismo sentimiento. Así que desde que se supo que sería en la Ermita, el escenario único, el entorno, todo, magistral desde todo punto de vista, un lugar como el mismo Bunbury lo dijo: “Un lugar místico, mágico”, la verdad no podía faltar a esa cita, el concierto estuvo increíble, muy bueno el sonido, la logística, todo de lujo.
En mi caso pude quedar exactamente enfrente del escenario, enfrente de Enrique, era como un maldito sueño hecho realidad, quede satisfecho, y pues todavía sufriendo la depresión post concierto, una experiencia vivida al máximo y muy feliz de estar ahí. Ahora solo me queda ver a Héroes del Silencio, seguiré apoyando la música de Enrique.”
Graciela Hernández nos cuenta su experiencia vivida, ella viajó desde Tela, Atlántida:
“Me enganchó Miguel, un amigo, me dijo que íbamos a ir a ver a Bunbury donde sea que estuviera, dicho y hecho, así fue.
Fue mi primer viaje sola, mi primer concierto de Bunbury porque las veces que vino a Honduras no pude ir por razones ajenas a mí.
Nos pasaron mil cosas buenas en el viaje, una de ellas fue encontrar a Los Santos Inocentes en un mercadito de Antigua, nos tomamos fotos con ellos.
El día del concierto fuimos hacer fila desde las 10 de la mañana, por eso estuvimos en primera fila, documentamos todo lo que pudimos del concierto, fue mágico, una experiencia inolvidable”.
Luego Miguel y Graciela me contaron una historia fabulosa, como consiguieron la firma de Bunbury en el poster de la gira:
“Fuimos a la Ermita de la Santa Cruz y nos encontramos con un niño que se llama Jonathan, vive con los papás cuidando la Ermita. Empezamos a platicar con él, le preguntamos cuantos conciertos había visto, nos comentó que varios, pero, el que más le había gustado hasta el momento era el de “Jarabe de Palo”, que los demás conciertos no recordaba mucho.
Nos dijo que el escenario más grande y bonito era el de Bunbury. En ese momento aprovechamos para decirle si podía conseguirnos la firma del Señor que aparecía en la foto de este póster, le dimos dos posters y el marcador dorado.
Jonathan regresó a los cinco minutos y nos dijo que aún no había llegado. Pero dijo que lo iba a esperar.
Nos fuimos pensando en que los posters jamás iban a volver, que regresarían hechos polvo y la mejor de todas las opciones, que regresarían firmados por Bunbury.
Cuando regresamos a la Ermita, por ahí de las seis de la tarde, el mismo día del concierto, preguntamos a los de seguridad si habían visto a un niño con la camiseta naranja. Ya cuando el VIP estaba casi lleno, empezaron a decirnos que nos teníamos que mover, cosa que era imposible porque estaba casi lleno todo y nadie iba a dar pasada.
Luego nos dijeron que el niño estaba en el público, Jonathan nos dijo: ¡Conseguí que te firmaran los dos”, los fue a traer y casi que ahorcamos a Jonathan abrazándolo, porque pensamos que no nos iba a cumplir”.
Luego Eduardo Mata que viajó desde San Pedro Sula nos cuenta:
“El ánimo de la gente esperando el concierto, la camaradería de Los Santos Inocentes en el mercado cuando los encontramos. Bunbury era primera vez que se presentaba en Antigua, la expectativa era muy alta, después de 20 años como solista.
Éramos muchos hondureños emocionados y expectantes con el desarrollo de este concierto, fue muy acogedor y de tintes más íntimos de lo normal.”
Set List Antigua, Guatemala:
Nathalie Sandoval nos cuenta que ella preparó una excursión para Antigua, iban alrededor de 40 personas con la agencia de viajes Five Stars, que todo marchó de maravilla y que el concierto lo disfrutaron al máximo.
Espero que los organizadores de conciertos se den cuenta que en Honduras hay suficiente público para recibir una vez más a Bunbury. ¡Ánimo que si se puede!
Mira el foto reportaje que preparamos con las imágenes que nos hicieron llegar: José Cruz, Eduardo Mata, Graciela Hernández, Miguel Galvez y Henry Santo:
