Hoy jugó Liverpool contra el Borussia Dortmund, partido espectacular, de esas remontadas épicas. Pero lo que más me llamó la atención fueron el estadio y público del equipo inglés.
Tronaban, rugían, era una verdadera caldera, un infierno para el visitante. Era como el Nacional, el Morazán o el Olímpico hace algunos años.
Y después de ver esto, te pregunto:
¿Te acordás la primera vez que fuiste al estadio?
¿Te acordás de ese día? Probablemente eras un güirro, ilusionado como nunca, imaginando cómo les contarías los goles que viste al Toño, el Flaco y el Gato (tus aleros de escuela). Con la boca abierta, impactado por la monumental estructura que antes solo habías visto en tele.
¿Te acordás cuando tu papá no te regañaba por las malas palabras que decías en el estadio? Ahí sí se podía mientras mamá no se diera cuenta…
¿Te acordás cuando los goles los celebrabas abrazando a tu papá, a tu mejor amigo, a la que ahora es tu esposa o esposo, a tu hijo, al compa de los frescos o simplemente al que te tocó de compañero de grada?
¿Te acordás cuando el “mercado negro” era tremendo negocio?. “Diez más sol, diez más”, “Vaya, compa, deme cincuenta más por sombra”, “Uyyyyy, hermanito, silla ya está agotado, lleve sombra si quiere”… “Es la final, alero, por eso silla hoy vale 250, tengo que ganarle alguíto”.
¿Te acordás de “La Lambada”?, aquel compa que vendía los cirios en sol? Era queso el alero cuando al mismo tiempo se fumaba dos cigarros y así prendidos se los metía en la boca.
¿Te acordás del Elástico? Aquel viejito guatemalteco que hacía el show del medio tiempo, se iba haciendo técnicas de un marco al otro, con el balón en la cabeza o en la espalda. Después se pasaba por silla y palco con una pelota de plástico partida en dos pidiendo coperacha pa’ las baleadas.
¿Te acordás cuando querías ser como esos ídolos que sudaban la camisa, que jugaban con huevos, que amaban el escudo? Esos que a pesar de que tenían complejo de celebridad, eran humildes y siempre regalaban una sonrisa por mas pijiados que salieran del partido.
¿Te acordás que llorar en el estadio si perdía tu equipo si se valía, si era de “machos”, porque después del amor a la familia, seguía el amor al equipo?
¿Te acordás cuando escuchabas los anuncios de los partidos en Canal 5: “La señal será bloqueada en la zona centro del país”? Uyyyyy, salías como loco a ver cómo ajustabas pa la entrada, las tajadas y un fresco.
¿Te acordás cuando los domingos religiosamente ibas a misa, almorzabas en familia y después directo al estadio?
¿Te acordás cuando la lluvia, el calor, la goma, la inseguridad, el transporte y hasta la falta de pisto no eran excusas para no apoyar en vivo a tu equipo favorito?
¿Te acordás cuando las barras de verdad iban a alentar, a dejar la voz, a reír y llorar por su equipo y no a matarse como animales?
¿Te acordas cuando el Estadio tronaba así?:
Foto: Grupo OPSA.
