Ironías de la vida… El equipo más grande de la historia pasa por uno de los apuros más grandes de la historia, eso nadie lo puede negar.
Al principio el madridismo se escudaba diciendo que lo del FC Barcelona era simplemente una moda, pero el sol no se puede tapar con un dedo, el tiempo ha pasado y hemos confirmado que lo hecho por el equipo culé en lo que va del Siglo XXI es algo impresionante, algo que va más allá de una modesta “moda”.
Por lógica futbolística el Real Madrid no se puede quedar de brazos cruzados, así que cada contratación es hecha con un solo objetivo, detener el arrollador paso del conjunto catalán; un claro ejemplo de ello fue la incorporación de José Mourinho en el 2010.
Florentino Pérez no ha encontrado la “fórmula” perfecta para acabar con el dominio del Barcelona, contratando técnicos y jugadores casi de manera desesperada, obteniendo siempre el mismo resultado: Nada.
La realidad es fría para el Real Madrid, comenzaron la temporada creyendo en el trabajo de Rafa Benítez pero a mitad de curso lo cortaron, esto por que simplemente vieron que el equipo no iba para ningún lado.
¿Su suplente?
Zinedine Zidane.
Es aquí donde entran los aficionados azulgranas, esos que han disfrutado de años de gloria y momentos épicos como el último 0-4 en el Santiago Bernabéu. Un verdadero seguidor del Barcelona es “antimadridista” por excelencia, así como el caso de Piqué y muchos acá en Honduras, ustedes no me dejarán mentir.
La incorporación de Zidane al banquillo “Merengue” al principio preocupaba al barcelonismo en sí, sin embargo los partidos han pasado y ahora solo hay un sentimiento que el antimadridismo puede expresar: FELICIDAD.
Florentino Pérez cometió un grave error al darle el equipo a Zidane, un técnico que apenas estaba tomando experiencia al mando del Real Madrid Castilla, y que de la noche a la mañana pasó a dirigir al Primer Equipo de la institución más grande de la historia del fútbol.
La confianza está puesta sobre el francés, pero tarde o temprano terminará siendo una víctima más del “Juego de Florentino”.
No estoy diciendo que Zidane sea un mal técnico ni nada por el estilo, simplemente concuerdo con la opinión de muchos aficionados blancos, quienes consideran que todavía no era el momento para “Zizou”.
El hecho de tener a una gloria del Real Madrid como director técnico obliga a Florentino Pérez a tener paciencia, pase lo que pase esta temporada el técnico del equipo blanco para la siguiente campaña tendría que seguir siendo Zidane, de lo contrario el dirigente blanco se estaría poniendo la soga al cuello.
El antimadridismo se sentiría de maravilla ante esa situación, creyendo que el francés no podrá con el peso “Merengue”, confirmando así otra temporada para el olvido.
Sin embargo hablamos de fútbol, así que cualquier cosa puede pasar.