Se fue Rafa Benítez del Real Madrid, aquel que todos tildaban como el cáncer del equipo, aquel que había venido a estropear las cosas, desde la actitud, pasando por las ganas, la armonía del grupo, etcétera.
Llegó Zinedine Zidane como el supuesto apagafuegos -un fuego que parece que no se apaga-, el sábado 27 de febrero. Se esperaba que se diera un giro diferente, que los jugadores del Real Madrid demostraron a sus aficionados que había esperanzas y que por muy mal que estén las cosas, el ORGULLO y el RESPETO por la camisa y EL ESCUDO está por encima de los nombres.
Un nuevo partido, ante un equipo grande y se termina de una manera bochornosa y con vergüenza, donde las grandes estrellas sin razón alguna están blindadas, donde el único que debe estar blindado es Zidane, que intenta rescatar al equipo. Es momento de Zidane empiece a hacer una lista negra, porque no están dejando el alma ni el sudor por el escudo.
En el Real Madrid abundan las cosas, sobretodo la falta de COJONES o GÜEVOS, como decimos en Honduras, para afrontar los grandes retos, las partidos ante los equipos grandes, ya que ni en Liga ni en Champions se ha hecho, al único equipo grande que se le ha ganado es al Athletic de Bilbao y al PSG con un gol que es más otra suerte que cualquier cosa.
Al terminar esta temporada, es hora de que se saque a jugadores sin COJONES, limpiar el vestuario y a empezar de nuevo, porque no es posible que canteranos como Borja Mayoral, Lucas Vásquez, Jesé le demuestren a otros jugadores como se defiende la camiseta blanca.
El equipo de primera de fútbol debe de aprender del conjunto de básquetball, ellos si son guerreros y sienten la camisa.
¡Real Madrid NO JUEGA A NADA! y DUELE, duele mucho.
Ya es hora de que dejemos de decir que tenemos 32 ligas, 10 Champions y todos los títulos, si bien es cierto eso es lo hace al conjunto merengue Grande, pero usarlo de excusa con cada perdida, nos hace ver mediocres. Como dijo Don Santaiago Bernabéu (Q.EP.D) “La camisa del Real Madrid se puede manchar de barro, sudor y hasta de sangre, pero nunca de vergüenza” y esto lo está haciendo Florentino con sus caprichos, algunos jugadores que no sienten la camisa, ni la portan con orgullo.