Barcelona recibe el domingo en el Camp Nou al Sevilla con la posibilidad de ligar su encuentro número 34 sin conocer la derrota con lo cual igualaría la marca para el invicto más largo para un club español, la cual está en poder de su eterno rival, el Real Madrid que dirigido por Leo Beenhakker, consiguió su imbatibilidad desde que cayó por 2-1 ante el Barcelona el 29 de septiembre de 1988 hasta que perdió por 2-0 ante el Celta de Vigo el 15 de abril de 1989.
Hasta el duelo ante el conjunto andaluz, el equipo blaugrana registra 26 triunfos y seis empates, 100 goles a favor y 19 en contra en sus 33 duelos desde que los mismos hispalenses lo sometieron por 2-1 el pasado 3 de octubre en el estadio Ramón Sánchez Pizjuan.
La solidez mostrada por la escuadra catalana en la presente temporada le permite ostentar una ventaja de ocho puntos sobre el Atlético de Madrid y de nueve con relación a Real Madrid aunque en realidad debe sumarse una unidad en cada caso puesto que en caso de producirse un empate en el primer puesto de la clasificación, se recurre a la serie particular y en el caso que nos ocupa, los dirigidos por Luis Enrique Martínez vencieron a los colchoneros en los dos encuentros de la temporada y parece ser bastante difícil que los merengues triunfen por 0-4 en la Ciudad Condal para igualar el revés que sufrieron en el estadio Santiago Bernabéu.
Además, merced a su victoria por 0-2 en Emirates Stadium, los blaugranas disponen de muy buenas opciones de alcanzar los cuartos de final de la Liga de Campeones de Europa y ya llegaron a la final de la Copa del Rey en la cual enfrentarán al Sevilla.
Con lo anterior, el sueño del tercer triplete sigue vivo pero si nos circunscribimos al campo doméstico, las opciones son muchas más claras y en caso de triunfar en sus dos competiciones locales, lograrían un “doble doblete” con lo que se convertirían en el primer club que lo logra tras 53 años ya que el último equipo que lo consiguió fue el mismo Barcelona en las temporadas 1951/52 y 1952/53, cuando era dirigido por Fernando Daucik y antes de ese logro, debemos remontarnos a las campañas 1929/30 y 1930/31 para encontrar al Athletic de Bilbao, escuadra que consumó su hazaña con Frederick Pentland como responsable técnico.
