¡Vaya!
Hice un verso sin esfuerzo, disculpen, pero siempre quise decir eso.
Ahora sí, metámonos de lleno a la nota.
¿Recuerdan que ayer les hable de unos “Héroes sin Capa”?
Bueno, aquí tenemos otro. Se trata de un joven indio llamado Akhilesh Kumar, quien inició el 2016 muy bondadoso, pues hizo una obra de caridad que se suele ver muy poco en el mundo.
Todo ocurrió en el Hotel Sabrina, ubicado al sur de India, cuando este hombre entró al restaurante para cenar, como lo haría cualquier huésped del hotel. Se sentó junto a la ventana, hizo su pedido y luego notó algo en la calle; un pequeño niño con aspecto desaliñado lo miraba fijamente.
Kumar no la pensó dos veces, con la mano lo invitó a entrar y el niño junto a su hermana menor llegaron en cuestión de segundos a la mesa.
Los pequeños se sentaron y en ese momento el mesero llegó con el pedido que le había hecho el hombre. Kumar le preguntó a los niños qué querían de comer y ambos señalaron el mismo plato que el pidió.
Los niños comieron completamente callados, se lavaron las manos y se fueron, luego Kumar pidió la cuenta.
Él pagaría con mucho gusto los tres platos de comida, pero el restaurante le dio una sorpresa. En la cuenta la cantidad a pagar era de cero, no tenía que dar dinero y a cambio le dejaron un mensaje escrito:
“No tenemos una máquina que pueda cobrar por la humanidad. Que cosas buenas le acompañen”.
El héroe sin capa casi se pone a llorar por lo sucedido.
¡Aplausos para Kumar y para el restaurante!
Toda esa historia la contó él mismo a través de su cuenta de facebook, así que gracias al Traductor de Google por ayudarme a entender lo que escribió.
