Lunes, 21 de diciembre del 2015.
En España la tabla de posiciones en la parte superior amanece sin ningún cambio, el Atlético de Madrid perdió su encuentro 1-0 ante el Málaga y el Real Madrid obtuvo un triunfo que lo mete nuevamente a la pelea, aunque hay que tomar en cuanta que al líder, FC Barcelona, le hace falta un partido por disputar.
Así está la lucha por el liderato en España:
Ahora, hablemos de lo más interesante de la tabla que vimos anteriormente. El Real Madrid jugó ayer en el Santiago Bernabéu ante el Rayo Vallecano, lo curioso es que antes de ese encuentro sus goles a favor llegaban a 32, pero mágicamente este día el número ascendió a 42: ¿La explicación? El cuadro merengue humilló a su rival.
Real Madrid 10-2 Rayo Vallecano
https://www.youtube.com/watch?v=5TnCSdCnYl0
Cuatro goles de Gareth Bale, tres de Karim Benzema, dos de Cristiano Ronaldo y uno de Danilo fueron suficientes para concretar la alarmante goleada, un resultado que sin duda le ha dado la vuelta al mundo, pero a pesar de ello, es un marcador con un sabor agridulce para los merengues: ¿Por qué?
“Hacía mucho tiempo que no veía algo tan esperpéntico y vergonzoso como lo que he presenciado en el campo, que no beneficia al Real Madrid, ni a nosotros, ni al fútbol español ni al estamento arbitral (…) Hemos perdido con nuestro fútbol pero nos sentimos pisoteados y humillados. Estoy orgulloso de mi equipo, ha jugado muy bien y no ha hincado la rodilla. Espero que no se repita esto que hace mucho daño a todos. Apoyo a mis jugadores que han hecho un gran esfuerzo a pesar de todo y, ahora, es difícil consolarles porque se sienten pisoteados”, mencionó al final del encuentro Paco Jémez, entrenador del Rayo Vallecano.
Como pudieron notar en sus palabras, el estratega del Rayo se sintió atacado por el arbitraje, exactamente por el réferi central del encuentro, el español Ignacio Iglesias Villanueva.
Hasta el minuto 14 el duelo estaba en igualdad de condiciones, 11 jugadores en cada equipo, donde el Rayo Vallecano había demostrado ser mejor, no es por nada que estaba arriba en el marcador (1-2), pero llegó el descalabro.
El árbitro le sacó una roja directa a Tito, defensor del Rayo, por una brutal entrada que dejó en el suelo a Toni Kroos. Hasta el momento el réferi bien, la entrada del jugador visitante era para cárcel como se dice popularmente.
Quedar con 10 fubolistas ante el Real Madrid es como caminar sin sombrilla bajo un aguacero, los blancos se fueron en busca del empate y lo consiguieron con un tanto Bale al minuto 25.
Apenas tres minutos después del 2-2 le comenzaba la pesadilla a Paco Jémez y a sus pupilos, una falta dentro del área y penal a favor del Real Madrid.
El castigo de los 11 metros era poco para el Rayo, pues el árbitro decidió sacarle una segunda tarjeta amarilla a Baena, quien le cometió la falta a Sergio Ramos, por lo cual el equipo visitante se quedó con nuevo jugadores dentro del terreno de juego.
El penal pitado es uno de esos que los jueces no suelen sancionar, pero que si son faltas, el típico vaivén en las áreas en acción de un tiro de esquina, algo que no merecía una cartulina amarilla pero que sucedió.
Cristiano Ronaldo no perdonó y marcó el 3-2 del partido al minuto 30.
En pocas palabras:
El Rayo Vallecano tenía una hora para aguantar con nueve futbolistas las embestidas que haría el Madrid con todo su combo.
El Santiago Bernabéu presenciaba lo impensable antes del inicio del juego:
4-2
5-2
…
10-2
Nadie marcaba 10 goles en un partido de la Liga Española desde el 1960, cuando el mismo Real Madrid derrotó 11-2 al Elche.
“El partido ha durado lo que hemos tardado en perder dos jugadores y encajar goles. Quedarte con uno menos era definitivo pero con dos es un asesinato. No hay manera de aguantar eso. El partido ya se había puesto tremendamente complicado y feo. Con once habría sido mucho más bonito para todos”, agregó el estratega del Rayo.
Entonces…
¿Por qué un sabor agridulce de una victoria 10-2?
Me hago esa pregunta por la reacción de un sector de los aficionados en el Santiago Bernabéu, mientras el duelo esta 11 contra 11 los madridistas abucheaban a sus jugadores y principalmente a su entrenador, Rafa Benítez, pues simplemente ven que el proyecto no va para ningún lado.
Después de las dos expulsiones el ambiente cayó en la frialdad, a duras penas se escuchaba a unos cuantos madridistas celebrar los demás goles, tanto así que incluso al final del encuentro unos aficionados se atrevieron a seguir abucheando al equipo blanco.
Reacción de Benítez:
“Hubo tres fases en el partido: Marcamos, encajamos los goles que nos obligan a tener más atención y nos imponemos aprovechando la superioridad numérica (…) Tengo la suerte de que salgo tarde y me concentro en el partido. El público no está contento en determinados momentos del partido y tenemos que hacerlo mejor”.
Llegó el momento de responder la pregunta principal:
¿Goleada injusta?
Desde mi punto de vista no, así es el fútbol y punto. Creo que el único error del árbitro podría ser el penalti/expulsión de Baena, y digo podría porque la verdad no hay nada claro.
El Real Madrid simplemente aprovechó la superioridad numérica en el terreno de juego, algo que es parte de este bello deporte.