Eddie Hernández conectó de cabeza un centro perfecto de Omar Elvir y meció las redes del Olimpia y de paso puso de pie a la hinchada de Motagua.
Elvir se ha adueñado de la banda izquierda gracias a su experiencia, buenos criterios con el balón y entrega en la cancha.
El motagüense me dice que la semana ha sido diferente previo al segundo de las semifinales del torneo Apertura.
Me imagino que las pulsaciones en esta semana han estado a mil.
Así es. Las pulsaciones están a full y estamos esperando que comience el partido para que dejemos todo en la cancha y poder aspirar a otra final.
¿Qué lecciones te dejó el primer encuentro ante Olimpia?
Que es un equipo que intenta ganar desde los primeros minutos. Por lo general, nosotros manejamos el partido, peroo creo que tuvimos que ser contundentes ante un gran rival que tiene todo nuestro respeto. Nosotros sabemos que cuando aceleramos podemos hacer mucho daño.
¿Vos creés que Olimpia jugará con la convicción de hacerlos pedazos en el segundo choque?
Yo creo que sí. Ellos jugarán con la intención de ganarnos, porque para ninguno hay mañana. El que pierda se regresa a casa y el que gane seguirá aspirando al objetivo. Se habla de que nosotros tenemos ventaja por la tabla, pero honestamente no estamos pensando en eso. El sábado vamos a salir a la cancha como que somos los necesitados del triunfo. Reitero: no nos vamos a confiar y menos ante un equipo que tiene grandes jugadores.
Omar, vos sos de la casa, sos de sangre azul… ¿Cómo tomaste las palabras del cipote de Olimpia, Kevin Álvarez, al expresar que en Motagua le inculcan odio por la camisa de Olimpia?
Yo creo que cada quien es responsable de lo que habla. Yo respeto la opinión de él y yo me preocupo por lo que haga Motagua, lo que se diga afuera o lo que digan otros jugadores es cosa de ellos. No le tomo mucha importancia a lo que él dijo.
¿Le podés aclarar eso a la afición de que en Motagua no se genera ese tipo de valores?
Es similar a la pasión que vive un jugador de Boca Junior cuando se enfrenta a River Plate o viceversa. Yo creo que la rivalidad es deportiva, ellos, en Olimpia, tienen esa rivalidad deportiva como institución y no como odio. Cuando hablamos de odio, hablamos de vandalismo y de hacerle daño a la integridad física de las personas.
¿Qué consejo le daría a Kevin Álvarez en relación a ese tema?
Eso se va aprendiendo, tal vez fue falta de experiencia el manejar ciertas preguntas o conceptos. Eso lo tiene que manejar de la mejor manera y ser más prudente a la hora de hablar.
¿Cómo has tomado la rivalidad entre Diego Vázquez y Héctor Vargas?
Sinceramente yo lo veo como algo deportivo. Eso ha aumentado a la rivalidad deportiva del equipo. Le ha dado un ingrediente extra con más pasión. En los últimos clásicos han tenido más pasión debido al ingrediente de los entrenadores y creo que de una u otra manera eso es bueno, porque aumenta la pasión en estos partidos.
En lo personal sentí que los clásicos no se estaban viviendo con la pasión que ahora la estamos viviendo.
¿Te gustaría que al finalizar la serie Diego Vázquez y Héctor Vargas se tomaran un cafecito como dos buenos amigos?
Sí, al final somos seres humanos, somos personas sociales y más allá de lo deportivo lo importante es la convivencia que se puede tener. Reitero y en buen sentido. En la cancha somos enemigos, pero fuera somos amigos. Lo vería normal si ellos… je, je, je se toman un cafecito, ya depende de ellos.
¿Cómo te ves el sábado después de las nueve de la noche?
Yo honestamente le pido a Dios que a esa hora el equipo le esté dando gracias a Dios y celebrando. Tengo la fe y respetando al rival me veo celebrando un pase a la final.
¿Hagamos una apuesta?
¿Que apuesta?
Yo digo que Motagua gana tres a cero… ¿Y vos?
Bueno… ja, ja,ja apostemos un almuerzo, yo digo que ganamos 2 a cero.