La Selección Nacional ya se encuentra en Honduras. La derrota ante Canadá (1-0) en el primer juego eliminatorio con destino a Rusia 2018 ha dejado un sabor amargo.
Los dirigidos de Jorge Luis Pinto entraron al país el sábado en horas de la noche de manera silenciosa, reventados por las largas horas de vuelo y con cara de pocos amigos.
La prensa quiso sacarle un par de palabras a Pinto, quien se miraba cansado y con pocas ganas de hablar.
“Venimos bien y tranquilos, ningún lesionado, optimistas y con el cambio de chip”, fue lo único que alcanzó a decir Pinto, porque era evidente que no quería hablar absolutamente con nadie de prensa deportiva.
“Queremos dormir y descansar, pero estamos con muchas ganas de ganar y con demasiado optimismo”, cerró Pinto.
Ante México es una final
Por su parte, Luis Garrido agregó que: “Hay que saber que somos una gran Selección y que lo podemos lograr. La verdad que solo fue un tropiezo, fue un duelo difícil, las cosas no salieron de la mejor manera y hay que seguir trabajando para el partido del martes”.
“Eso es lo lindo del fútbol que te da revanchas y qué mejor que es pronto, el martes, y es como una final”, afirmó Garrido.
Pinto es consciente que no la tiene nada fácil para el juego del martes ante México. Si llegamos a perder ante los aztecas las cosas se van a poner color de hormiga para la Bicolor y para Pinto.
Honduras tiene que sudar la gota gorda para quedarse con los primeros tres puntos. Mañana entrenarán a doble horario en la ciudad de San Pedro Sula.
