La noticia ha conmocionado. Abby Wambach, una de las mejores jugadoras del mundo, se retira.
No more –dice.
No más fútbol. Ni concentraciones. Ni días duros de entrenamientos.
La seleccionada nacional de Estados Unidos ha decidido tomarse un descanso tras proclamarse Campeona del Mundo con su selección en Canadá.
Así que Abby no estará en los Juegos Olímpicos de Río. O al menos que alguien la convenza. Sí, por favor, hay que convencerla.
Si eso ocurre –y si las gringuitas “pechiochas” logran el Oro en Brasil-, será la tercera medalla para ella. ¡Casi nada! ¡Y yo que ni en enchute gano!
Pero habrá que ver. Por los momentos, Abby ha decidio ponerle fin a una brillante carrera de catorce años de éxitos.
“Después de mucho pensar y hablar con mis amigos, familiares, compañeros de equipo y nuestro cuerpo técnico, he decidido finalmente llevar mi carrera futbolística a su fin”, dijo un comunicado.
Y agrega: “Ha sido un paseo increíble y maravilloso, no puedo esperar a ver lo que el siguiente capítulo de mi vida me trae”.
A sus 35 años, posee el récord en goles a nivel de selecciones: 184 goles anotados en los 252 partidos que disputó con la camiseta de USA.
Además, en 2012 recibió el Balón de Oro en 2012.
Según cuenta, sus primeras patadas a las pelotas las dio cuando tenía cuatro años.
En 2002 llegó a la Selección y se fue a los Olímpicos de Atenas, donde Estados Unidos venció a Brasil en la final y se llevó todo el gold, my friend.
Y también se lo llevó en Londres. Oh, my God, qué woman esta.
Abby jugó en la liga estadounidense con el Washington Freedom, Magic Jack y por último en el Western New York Flash.
Su partido de despedida será el 16 de diciembre cuando las gringuitas se enfrenten a China en Nueva Orleans.