Cuántas veces escuché o leí la frase “It ain’t over till it’s over” (No se acaba hasta que se acaba).
Era de Lawrence Peter Berra.
El legendario Yogi Berra.
(El apodo se lo puso su amigo Bobby Hofman, quien aseguraba que Lawrence parecía a un santo hindú -yogui-, que habían visto en una película, ya que se sentaba con las piernas y los brazos cruzados después de perder un juego).
Pues este inmortal del baseball acaba de morir en la madrugada del martes a la edad de 90.
Con diez Series Mundiales ganadas con los Yankees de Nueva York, fue inducido al Salón de la Fama de Coopertown en 1972. Participó en quince Juego de Estrellas. Jugaba de cátcher.
Nadie jugó más Series Mundiales que él: 14.
“Aunque lamentamos la pérdida de nuestro padre, abuelo y bisabuelo, sabemos que él está en paz con mamá”, dijo su familia en un comunicado. “Celebramos su vida notable y estamos agradecidos de lo que él significó para muchos. Verdaderamente se le echará de menos”.
“Estamos profundamente tristes por la pérdida de una leyenda de los Yankees y un héroe americano”, dijo la novena de Nueva York en su cuenta oficial de Twitter.
Yogi firmó su primer contrato con los Yankees en 1942, pero debutó hasta en 1946 porque le tocó combatir en la Segunda Guerra Mundial.
FRASES
“El béisbol es un noventa por ciento mental. La otra mitad es física”.
“El juego no se acaba hasta que se acaba.”
“Si no sabemos hacia dónde vamos, terminaremos en cualquier otro lugar”.
“Uno puede observar muchas cosas con sólo mirar”.
“En realidad yo nunca dije lo que dije”.
“Siempre voy a los entierros de los demás, porque de lo contrario ellos no vendrán al mío”.
