De mal gusto. Una estupidez. Eso es lo que ha hecho la revista satírica Charlie Hebdo, la misma sufriera un atentado terrorista que dejó doce muertos en sus oficinas en París.
Pero los editores de Charlie Hebdo al parecer no aprendieron la lección de lo ocurrido el 7 de enero de este año.
Pues acaban de publicar dos grotescas caricaturas en las que aparece Aylan al-Kurdi, el niño sirio de tres años que falleció dos semanas frente a las costas de Turquía.
Después de convertirse en la imagen de un drama humano internacional, Aylan vuelve a convertirse en noticia al aparecer en los contenidos de la revista.
“¡Bienvenida a los inmigrantes!”, titula la publicación sobre un texto en el que puede leerse “tan cerca de la meta…”.
Como imágenes, la silueta de Aylan boca abajo sobre la arena con la cabeza dentro del mar.
Detrás, un cartel que dirige los recuerdos hacia un popular restaurante de comida rápida.
“¡Promoción! Dos menús infantiles por el precio de uno”, escribe Charlie Hebdo en el letrero.
En otra página, Aylan aparece dibujado con solo las piernas fuera del agua contemplado por una figura identificada como Jesucristo.
“Los cristianos andan sobre las aguas”, dice. El menor le contesta: “Los niños musulmanes se ahogan”.
Como título, la revista publica: “La prueba de que Europa es cristiana”.
Lo que Charlie Hebdo ha hecho ya provocó críticas a nivel mundial por la falta de respeto y la insensibilidad por la trágica muerte de Aylan, quien falleció junto a su madre y hermano luego que un barco repleto de migrantes sirios naufragara frente a las costas de Turquía.
Las ilustraciones son de Laurente Riss Sourisseau, uno de los sobrevivientes del atentado.
Un vocero de Charlie Hebdo, sin embargo, aseguró que lo que Riss pretende es “criticar el cinismo de Europa ante el drama de os refugiados”.
